El cubo de Rubik

Navegando por internet leí que un robot resolvió el cubo de rubik en 37 segundos, un paracaidista, en plena caída libre, en 31,5, una niña de tan solo 3 años en 114 y, como si fuera poco, en Inglaterra 25 pulpos “liberan sus tensiones” jugando con el cubo en cuestión…

Por suerte también observé que hay miles de blogs, foros, tutoriales, manuales, videos y hasta cursos que fueron creados para ayudar a los abatidos y desanimados mortales que, como yo, intentan resolver y/o debelar este gran enigma.

El cubo de Rubik es una creación de Erno Rubik, un profesor, arquitecto y diseñador nacido en la ciudad de Budapest, Hungría. Su objetivo, bastante alejado del entretenimiento, era ayudar a que sus alumnos de la facultad de Arquitectura adquirieran una mayor y mejor perspectiva visual en 3 dimensiones. De esa forma, en 1974 inventó un cubo de una sola pieza dividido en distintas partes que se movían alrededor de un eje central.

Rubik percibió que había creado un rompecabezas bastante difícil de resolver y, en 1975, lo patentó en su país como “Cubo Mágico” para luego, 2 años más tarde, ponerlo a la venta en distintas jugueterías de la ciudad de Budapest. Como el juego utilizaba piezas de plástico ensambladas entre sí, era bastante barato producirlo, y por tal motivo, en 1979, Rubik firmó un acuerdo con la empresa Ideal Toys para que su cubo se pudiera vender en otras ciudades.

Con el paso de los años, el arquitecto se convirtió en el presidente de la Academia de Ingeniería húngara. Más tarde lanzaría la Fundación Rubik para ayudar a jóvenes diseñadores con talento.
Actualmente Erno disfruta de su jubilación, pero el Estudio Rubik continúa diseñando y creando juegos para niños y adultos.

Se estima que se han vendido 350 millones de cubos en todo el mundo. Para muchos, este juego es una verdadera obsesión. Por ejemplo, destacadas universidades de todo el mundo han prestado sus salas de estudio para experimentar nuevos algoritmos y ecuaciones que resuelvan los procedimientos para armar este rompecabezas en la menor cantidad de movimientos posibles. Crease o no, también es conocido un caso ocurrido en 1981, en el que una mujer de Alemania pidió divorciarse de su marido alegando que "él hace mucho que no conversa conmigo, y cuando se va a acostar está tan cansado de jugar con el cubo que no me hace ni un cariño".

¿A qué se debe el éxito arrasador de este cubo?, ¿por qué tiene tantos fanáticos regados por el mundo?, ¿mi vecino es más inteligente que yo por que lo resuelve con los ojos cerrados?, ¿ acaso el cubo mágico es la combinación perfecta entre simpleza y complejidad?, ¿estoy condenada a resolver únicamente el cubo “pink”?.


En fin, amo y señor del gran interrogante ¿alguna vez podré?, este mágico cubo seguirá triturando cabezas por muchos años más… de eso sí que no hay ninguna duda.

Adieu!!!.

Para seguir leyendo:
-Objeto Museístico: El Scrabble
-Museo del Videojuego
-Objeto Museístico: EL Playmobil
-Museo del naipe
-Personaje Museístico: Mario Bros