La historia de Mata Hari

Para la cultura popular de buena parte del mundo, Mata Hari fue una hermosa y sensual bailarina de danzas orientales, que utilizó sus dotes amatorias para manipular a su antojo a los potentados de gran parte de Europa y que terminó siendo ejecutada por espía. Hasta aquí lo que más o menos todos conocemos.

La historia de esta feme fatale hindú tiene un eco de tragedia griega, con una heroína que se levanta del lodo y alcanza la cumbre para entonces derrumbarse y finalmente perecer. Tiene rasgos del machismo dominante, pues el destino de una mujer que pretende llevar de la nariz a los hombres es la fatalidad, y esa fatalidad funciona como un juicio moral acerca de sus acciones. Y tiene una protagonista, cuyo nombre real fue Margaretha Gertruida Zelle.

La fama de seductora de Mata Hari se inició a los 15 años, en la Escuela Normal de Lyden. La mayor parte de sus años en Lyden la pasó huyendo del acoso sexual y de los castigos del director de la institución, Wibrandus Haanstra, quien, a pesar de estar casado, llegó a arrastrarse a sus pies, a gimotear en público y a escribir horrendas poesías con tal de conseguir sus favores. En 1895 se casó con Rudolf John McLeod, un oficial holandés conocido por su apego al alcohol y a los burdeles. Ese mismo año se trasladaron ya con su primera hija hacia las Indias Orientales, lo que le permitió un contacto directo con la cultura de ese continente. La relación con su marido se colapsó después de perder a su segundo hijo, Norman, el cual murió envenenado aparentemente por una niñera desequilibrada de quien nunca más se supo. A su retorno a Ámsterdam, donde el militar fue absorbido por el alcoholismo y la vida mundana, dejó a su hija y marchó rumbo a la Ciudad Luz, Paris. A partir de ese momento no se volvería a saber más de Margaretha Geertruida Zelle, sino de Mata Hari.
La mayoría de historias sobre su vida coinciden en que su primer benefactor fue “el Barón de Marguerie”, siendo él quién la introdujo a la sociedad como una adolescente oriental. Con un currículo completamente alterado, modos sensuales y misteriosos, y un cuerpo prácticamente desnudo a excepción de las cúpulas de bronce que cubrían sus senos (decía que era porque su ardiente esposo le había arrancado los pezones de sendos mordiscones) Mata Hari se dispuso a conquistar el mundo desde el Museo de Arte Oriental de París. La explícita sexualidad de su danza dejó maravillado al público y por tal motivo le abrió las puertas de los salones más refinados de París, Madrid, Milán, Viena, Berlín...también le abriría las puertas de muchas de sus alcobas, en especial la de personajes encumbrados.
Tras la crisis de 1911 entre Francia y Alemania por la cuestión de Marruecos, el fatalismo se apodero del ánimo colectivo europeo (si hay un símbolo de esta época es el desastre del Titanic de 1912: el hundimiento del barco que ni siquiera Dios podía hundir). Mata Hari pasó de ser una artista de costumbres bastante liberales a una figura promiscua y decadente, que además se acercaba a cumplir cuarenta años. Por ese entonces no le dio importancia. En el fatídico verano de 1914 estaba de gira por Berlín cuando se hizo amante del jefe de policía de la ciudad y más tarde de Kraemer, cónsul alemán en Ámsterdam y jefe del espionaje de su país quien pensó en ella para obtener información de los militares franceses. Mata-Hari se convierte en la agente H-21 . En enero de 1917 se produjo un hecho clave en su historia: los franceses interceptaron un mensaje cifrado de los alemanes que se refería a los movimientos de uno de sus agentes, “H 21”, que resultaron ser los mismos que los de Mata Hari. Cuando la bailarina volvió a París y cobró un cheque de una cuenta que los franceses sabían que era usada por agentes alemanes, terminan las sospechas (siendo interrogada sobre la razón del cheque, Mata Hari exclamaría que era un pago por sus afanes amorosos: "¡Es mi tarifa! ¡Jamás nadie me dio menos!"). El 13 de febrero fue arrestada en París y enviada a la prisión de Saint-Lazare. La leyenda dice que, cuando fue apresada, llegó a mostrarse desnuda ante los ojos de sus captores y les ofreció bombones en un casco prusiano. Al principio, Mata Hari negó toda actividad en favor de Alemania y pretende haber hecho contacto con el enemigo con el único fin de entregar información a Francia. Después, termina por reconocer que su juego es mas complejo y que, atraída por el afán de lucro, se dedicaba efectivamente a entregar información a los alemanes desde el comienzo de la guerra, aunque afirma haberse burlado de ellos, transmitiéndoles sólo información sin valor. A pesar de todo, el consejo de guerra que juzga el caso la encuentra culpable, ya que considera que los mensajes interceptados y las grandes sumas que Alemania le había entregado son pruebas abrumadoras, Mata Hari es condenada a muerte. Su ejecución solo dio más fuerza a la mitología. Una multitud parisina se reunió la mañana del 15 de octubre de 1917. Vestida de negro con un sombrero de ala ancha y botas, la exótica bailarina, momentos antes de que un pelotón de fusilamiento del Ejército francés acabara con su vida, levantó un brazo para despedirse coquetamente de los soldados que le dispararían. También se dice que no vestía más que un abrigo de piel, del cual se despojó para persuadir a sus ejecutantes. Lo cierto es que murió de los 12 disparos que le fueron destinados y que nadie reclamó su cadáver.
Es claro que la joven mantenía continuas relaciones con oficiales alemanes. Para obtener dinero, seguramente les prestó algunos servicios y les transmitió mensajes. Pero su juego era inaceptable en esos tiempos de guerra y sufrimiento. Por ello, fue condenada doblemente, como mujer escandalosa y como espía. La única certeza que se tiene es que Mata Hari sentía una gran obsesión por los uniformes militares, como se puede apreciar en alguna de sus biografías: ”Amo a los militares. Los he amado siempre y prefiero ser la amante de un oficial pobre que la de un banquero rico”. Se dice que las pruebas de la investigación que la llevó a juicio y a la muerte permanecerán cerradas por cien años. Sus defensores aseguran que al abrirse, la vida de la "espía más peligrosa de todos los tiempos", dejará al descubierto la historia de una mujer fascinante, por cierto, que trató de sobrevivir en medio de una guerra cruel.
Salud!